Nombre:
Lugar: Asuncion, Paraguay

miércoles, julio 01, 2009

Mirarte y no poder besarte

Querida Allegra: qué triste es mirarte y no poder oler tu olorcito de bebé, besar tu cachete rosadito, tocarte el pelito, tenerte cerca mío! Qué triste, amor!
Sin embargo, por lo menos te puedo ver y saber que estás bien. No sé cómo haré para aguntar todo el tiempo que me queda en este país! No lo sé! Cada día que pasa me siento más consternada porque las ganas que tengo de estar contigo son inmensas, increíbles, gigantescas, astronómicas...no pensé que te iba a extrañar tanto. Pensé que sí, que claro que lo haría pero no me imaginé la magnitud de este sentimiento.
No vale la pena nada sin tí. Por suerte no te das cuenta. Te veo preciosa y feliz, jugando y cantando y no te das cuenta de nada. No te enojas, no te enfadas. Tú estás feliz con tu papito y con la gente que te quiere.
Qué grande es el sentimiento, Allegra! Qué lazo más fuerte me une a tí! No te puedes imaginar!
Me contentaré comprándote cosas para que cuando nos volvamos a ver, rías sin parar. Así me consuelo yo, por lo menos.
Mientras que el tiempo corre, te escribo para que el día que puedas leer y entender lo que leas te enteres que tu mami, aquel julio de 2009, lloraba sin parar por tí, desde Barcelona y rezaba, cada noche, para que estuvieras bien, mientras contaba los segundos que faltaban para volver a estar juntas.