A pasos acelerados...

...se va el 2006 y, como siempre, a estas alturas, surgen los resúmenes de lo que ha dado de sí el año que se nos va, los propósitos para el año que entra, las nostalgias, los recuerdos, los encuentros y desencuentros pero, por sobre todo, los TEMORES y las PREOCUPACIONES.

Preocuparse es sano, es responsable. Denota compromiso en un mundo donde el compromiso está más que obsoleto. Preocuparse indica amor, señala respeto y tiende a elevar a las personas.

Este es el momento de preocuparme por Allegra y por lo que le espera en el 2007, si es que llega a nacer (si no se arrepiente antes y opta, sabiamente, por permanecer bajo la forma de angelito del Cielo).

Este es el momento de preocuparme por el papito de Allegra, por la familia de Allegra, por la economía que, eventualmente, esperaría a Allegra.

Este es el momento de cerrar los ojos, elevar mi plegaria al Cielo y concientizarme, profunda e íntimamente en que soy una persona extremadamente bendecida y que estas bendiciones deberían redundar en más servicio, más comprensión, más entrega al prójimo y, si ese prójimo llegare, por fortuna, a ser Allegra, sirva este acto de contrición de suficiente declaración de intenciones para con ella y, si no lo cumplo...QUE DIOS Y LA PATRIA ME LO DEMANDEN...así, muy "presidential way", diríamos, pero en sentido espiritual.

Feliz Año 2007!!!! La vida es bella, sólo debemos aprender a vivirla...