Mi vida por tu vida

Querida Allegra: todos los días rezo por tí.

Todos los días rezo y espero que nada dañe tu vida, tu salud, tu felicidad.

Todos los días rezo y espero que nade me pase a mí para que nade te falte.

Todos los días rezo y espero que sepas perdonar mis fallos como mamá inexperta.

Ayer, esos angelitos que te cuidan y que escuchan mis plegarias, me demostraron que jamás estás sola y que puedo quedarme tranquila porque cuando mi ojo te pierde de vista, los ojos de quienes son más poderosos que yo, están alertas.

Thea abrió una puerta...saliste a la calle sola...un coche, que no te veía, venía hacia tí.

Hoy estás aquí, con nosotros que te queremos, que te adoramos y que daríamos nuestras vidas por la tuya porque nuestras vidas, Allegra, sin la tuya, no son vidas. Sin tí, sería algo más patético que un zombie.